Qué es el QiGong

Para saber qué es el QiGong lo mejor es vivenciarlo por nosotros mismos, ya que adquiere un significado más allá del literal, donde el trabajo es realizado con aquella Energía Vital que tan alegre pero desconocidamente pronunciamos en Occidente: el Qi (Chi), o lo que denominaríamos poética pero más acertadamente como “vapor que se eleva al hervir el agua de arroz”.

Muy antiguamente y con la intención de regular esta esencia presente en todo y en todos nosotros, danzaban y respiraban al compás para armonizarse con los ciclos del Cielo y la Tierra, en similitud a la danza giratoria realizada por los místicos sufís o las Danzas orientales en sus versiones más puras y místicas, donde conectaban con el ser interior a través del movimiento – forma es vacío, vacío es forma -.

Se trata de una meditación que alienta nuevos estados de conciencia permitiendo “abrir la puerta entre lo físico y lo espiritual”. Se decía que con ello entendían los secretos de la energía de la Luna, la Tierra y la órbita de estos alrededor del Sol. Mediante estos ejercicios armónicos, que en ocasiones pueden hacer referencia a las Fuerzas de la Naturaleza e incluso a animales, obtendremos beneficio tanto a nivel corporal, mental, emocional como espiritual, liberando de obstrucciones el flujo de la energía vital o Qi al dirigirla donde se considere necesario.

La interpretación de su definición va estrechamente ligado a la historia del pensamiento chino ancestral, tratándose de una singular forma de cultivo personal, una nueva perspectiva y toma de conciencia mediante ejercicios físicos basados en la Medicina Tradicional China, sincronizados con la respiración y procurando un estado meditativo que permite una conexión real del cuerpo y la mente.

Es importante reconocer las diferentes formas en que podemos encontrar el modo de escribir su nombre, puesto que si bien la pronunciación pueda parecer similar en la traducción a nuestra lengua, dependerá del método de transcripción fonética utilizado en cómo lo encontraremos escrito, pudiendo observarse indistintamente QiGong o ChiKung, dependiendo si utilizamos el método Pinyin o Wade-Giles.

Siempre es más recomendable utilizar el Pinyin, con el que la pronunciación y por tanto su significado se acercará con más precisión a la interpretación o significado original.

Más allá de su traducción literal – Qi: Energía Vital, Gong: Trabajo o Cultivo -, es una práctica que nos ayuda a mejorar la conciencia y equilibrio entre nuestro cuerpo y mente, y en consecuencia al bienestar energético y espiritual, mediante el estado meditativo, físico y mental de secuencias y posturas establecidas, basada en los fundamentos taoístas como el Yin Yang y los Cinco Elementos, estimulando y equilibrando así puntos, zonas o canales energéticos relacionados con la Medicina China.

Posee un marcado carácter terapéutico con el que se procura prevenir el dolor, además de fortalecer las articulaciones y reducir el riesgo de enfermedades del sistema cardiovascular entre muchas otras; es por eso que sus técnicas poseen una gran popularidad como ejercicio adaptado mediante sus movimientos suaves para cualquier practicante, siendo una de las razones de estar recomendado especialmente para personas mayores.

Insisto nuevamente y especialmente en estos casos, acudir a los consejos de personal cualificado y conocedor de este perfil de practicantes.

Cabe destacar que se trata de la base necesaria sobre la cual practicar cualquier otra disciplina, física o mental, por lo que las prácticas como el Tai Chi y otros métodos similares necesitan ineludiblemente del QiGong como fundamento, descubriéndonos un estratégico y ancestral método que escenifica las manifestaciones de la Naturaleza para equilibrar y beneficiar nuestra salud física, emocional y espiritual.

Observamos que al escribir ambas disciplinas tal y como las pronunciamos se confunden ambos conceptos: Tai Chi y Chi Kung. En este caso escribimos igual el concepto Ji y Qi (ambos pronunciados Chi), cuando realmente el significado es muy distinto.

Para entender el significado y por ende las diferencias con el TaiChi, deberemos volver a recurrir a la traducción del Pinyin, es decir TaiJi, así Tai significa Más Grande o Remoto y Ji vendría a ser Extremo, Polo o el sumo o mayor. La traducción considerada más acertada será la de Extremas Polaridades o Los más Extremos Polos, como Yin Yang.

Se dice acertadamente que el Tai Chi Chuan es en sí mismo un estilo de QiGong, aunque con una latente carga de interacción con el entorno o proyección de la energía como ya mencioné, donde las Fuerzas representadas en el BaGua, -conjunto de Trigramas o Fuerzas naturales arquetípicas orientadas hacia ocho direcciones-, son vivenciadas a través de la interiorización en sus secuencias o Formas.

El objeto principal de la creación o establecimiento de las bases del QiGong fue prolongar la vida en su estado más óptimo y en armonía con el Universo y la naturaleza del entorno, mantener la salud de monjes budistas que meditaban durante largos años. Como mencionaba, constan indicios de su práctica que datan desde hace 4.000 años, pero este no se concibió como un arte de lucha a pesar de ser la disciplina madre de los practicantes del WuShu o artes marciales chinas como el Kung Fu.

Por otro lado, el Tai Chi Chuan (no la filosofía del TaiChi !), es decir la aplicación marcial del TaiChi con las manos vacías, aprovecha también los conocimientos del poder de movimiento interno, tratándose de una disciplina mucho más joven, concebida en buena parte con la intención de mantener una sociedad instruida en la defensa personal, pero ante todo en el conocimiento y dedicación de su cuerpo, mente y en consecuencia de un espíritu en equilibrio.